Nuestros Clubes de Lectura

Literatura de viajes

Club de lectura de poesía.

Literatura juvenil

Clásicos universales

Novelas de género (novela negra, ciencia ficción, etc.)

Fortunata y Jacinta, cuarta parte: y VI

Libro que estamos comentando: 
Fortunata y Jacinta

Hola a todas y todos, llegamos al final de este libro que comenzamos a finales de febrero, cuando el mundo era otro. Quince semanas de lectura y comentarios. Antes que nada quiero deciros que ha sido un placer leer "Fortunata y Jacinta" con vosotras y vosotros, vuestros comentarios, vuestras miradas, han enriquecido el libro, muchas gracias.
Os recuerdo también que la próxima semana comenzaremos con la lectura de "La señora Dalloway", de Virginia Woolf.
Pero dejémonos de preámbulo y metámonos en harina.
 
Capítulo VI. Final
Tengo que andar con pies de plomo en estos comentarios porque no os quiero destripar nada a quienes no lo hayáis leído antes y no sepáis cómo termina (tampoco a los que lo hayáis olvidado).
Antes de comenzar: ¿cómo creéis que va a terminar esto? Yo, antes de leer la primera página tenía una idea de un final (pero me parecía demasiado malo para que llegara a puerto) y luego pensé otros posibles finales. En los comentarios os digo si acerté o no en alguno de ellos.
Me gusta esta circularidad, este terminar en el mismo lugar donde todo empezó, con los personajes protagonistas que lo eran en sus inicios (Plácido Estupiñá, José, Segunda...). Me da la sensación de que esto es algo que ha hecho con toda intención Galdós: ¿de verdad crees que puedes medrar, que puedes progresar, que algo puede cambiar en tu vida que está ya escrita desde el mismo día en el que naciste?
No entiendo algunas cosas (como habéis podido ver en los comentarios a vuestros comentarios en entradas anteriores): por ejemplo este afán por incluir nuevos personajes de última hora que resultan relevantes (o muy relevantes) en la trama (Ballestero, Aurora...) igual que hizo en su momento con Feijoo (que vino, salió a escena, hizo lo suyo, y se fue), creo que sería más interesante que toda la historia se sostuviera, de principio a fin, en los mismos personajes. Igualmente tampoco entiendo esos altibajos de los personajes, especialmente de dos protagonistas: Fortunata (tan madura, tan alocada, tan arrabalera, tan luchadora por unas consas, tan de dejarse rendir...) y Maxi (de pronto tan cuerdo, de pronto tan loco, pero tan tan loco); casi parece que los únicos que no cambian desde los primeros capítulos son los secundarios, como Plácido (el siervo de la familia desde las primeras páginas) o Juanito (qué cosas).
Veremos en varias ocasiones cómo Fortunata y otros personajes dudan sobre la cordura de Maxi, por ejemplo: "¿está cuerdo o está más loco que antes?" (p. II, 699), "Pero ¿este hombre está cuerdo, o cómo está? ¿Eso que dice es razón, o  los mayores disparates que en mi vida le he oído...?" (p. II, 701), "lo denunciado por aquel hombre que a veces parecía demente, a veces no, revestía las apariencias de un hecho cierto." (p. II, 706). Sí, como ya dijimos, es similar a lo que ocurre con don Quijote: que cuando argumentaba parecía tan cuerdo que admiraba, y cuando hacía locuras parecía tan loco que movía a risa, lo que pasa es que no, Maxi no es don Quijote, y creo que al personaje le falta consistencia, cuesta creérselo. ¿Qué pensáis? Es interesante que sea él quien cierra el libro y el modo como eso sucede, ¿no os parece?
Por cierto, ¿Fortunata quiere a este niño, a Juan Evaristo Segismundo?, ¿o es un medio para conseguir algo?, ¿y a costa de qué? Qué pensáis de todo esto.
Fortunata tiene unos cuantos momentos gloriosos en este último capítulo, alguno de ellos no lo voy a comentar para no desvelar pasajes importantes, pero otros son, insisto, gloriosos: su primera salida dejando al bebé en la casa (y llevándose la llave, ay) es antológica, y a consecuencia de su salida la tertulia que se monta en la escalera, magnífica, qué imagen, qué secuencia. Pero por otro lado, cuando parece que hay un horizonte claro y un futuro luminoso, parece que la propia Fortunata se encarga de desbaratar todas las esperanzas (o no, ¿qué sabemos?, no puedo contar nada). Igual que sucede en el momento en el que manda llamar a Estupiñá y le manda escribir: ¿os parece verosímil?, ¿no vuelve a recordaros al Quijote? (y no diré en qué momento, no al menos aquí). Por cierto, a estas alturas del libro ¿tenéis clara cuál era la idea de Fortunata?
El papel de Guillermina "la santa" y el de Ballester en los últimos momentos es también muy interesante.
Y, en fin, de Jacinta y Santa Cruz, no diré nada. Os invito a echar una mirada desde la perspectiva de clases, a ver qué tal, con respecto al final de la novela y cómo queda todo anudado.
 
En fin, espero que hayáis disfrutado de este libro, para mí, como os dije al principio, ha sido una lectura muy placentera.
Saludos cordiales
Pep Bruno