Capítulos 11, 12 y 13.

Buenas tardes, queridas lectoras, queridos lectores. Esta semana comentamos los tres últimos capítulos de la segunda parte de En las antípodas, esto es, los capítulos 11, 12 y 13. Dejamos para la semana próxima, que será la última antes de las vacaciones, la tercera y última parte del libro.
Capítulo 11
Bill Bryson continúa pasando unos días con sus amigos de Melbourne, Carmel y Alan. Hay que destacar el carácter y la personalidad del matrimonio, enfrascado en una relación alegre y complaciente. Alan parece ser, de los dos, el más extravagante…, sobre todo en los comentarios y otras advertencias que hace a su amigo americano (ten cuidado no te abandonen en la Gran Barrera de Arrecifes como al matrimonio americano, que eres muy despistado; sé mucho de muchas cosas, Bryson…), y su mujer parece un encanto, ¿qué me decís cuando le responde: “pero no tienes ni idea de sombreros”?
Visitamos, en Victoria Oriental, el King Valley: un rincón privilegiado del mundo: más verde que ningún otro lugar de Australia que hubiera visto y con un fondo de montañas con una respetable prestancia. Ahí es donde el matrimonio tiene su casita de recreo, con la vista de campos de tabaco, viñedos… un paisaje de cuento, como el de las pinturas de Gran Wood y su Iowa idealizada.
La casa está en una zona elevada, en una zona peligrosa de incendios. En este país estás a merced de la naturaleza, amigo. Es la vida. (…) aprecias más todo esto al saber que desaparecer tras una humareda.
Esta filosofía de vida dice mucho del carácter australiano, ¿no os parece? Como también lo hace, y así lo apunta Bryson el que uno de sus mayores héroes sea el asesino despiadado y forajido Ned Kelly: dice mucho del carácter australiano, que la nación no haya creado ningún héroe perteneciente a las fuerzas del orden … Los héroes de la tradición australiana son malos, y se les denomina bushrangers, y el más famoso de ellos fue Ned Kelly.
Y, con el objetivo de visitar la ruta de Ned Kelly, viajamos hasta Glenrowan, donde asistimos a un espectáculo tan malo, tan malo, tan malo, que merece lo que cuesta… El gigante Ned Kelly, con su famosa armadura es otro cachivache más del estilo de la langosta gigante, el Kelly Tree, el bosque donde se refugió Kelly con su banda durante tres años en el que asesinó a tres policías, es un bosque raquítico, sombrío, huraño. Menos mal que luego hay lugares con más belleza, como el mirador Powers Lookout, o el Parque Alpino. Sin embargo, el Museo de la Lombriz Gigante me ha dejado con la boca abierta (creo que ya no existe, menos mal, porque en menudas condiciones estaban los animales en esas jaulas, medio dormidos, con un calor horrible), y también, la manera en que se regodea el editor amigo de Bryson al narrarle algunas desapariciones dramáticas de turistas.
Algunos enlaces:
King Valley
Grant Wood y algunas de sus pinturas.
El incendio de 1939 que casi arrasó toda Victoria.
Temporada de incendios forestales 2019 2020
Ned Kelly
Más sobre Ned Kelly, Museo Nacional de Australia
 Película La verdadera historia de la banda de Kelly. Clip de seis minutos.  
Ned Kelly, película de 1970. Curioso fragmento con Mick Jagger
Sidney Nollan y sus pinturas sobre Ned Kelly
La ruta de Ned Kelly
Glenrowan, el pueblo donde se escondió Ned Kelly y su banda.
El Museo de Ned Kelly en Glenrowan
Ned Kelly’s Last Stand at Glenrowan, 1880
The Big Ned Kelly
Kelly Tree
Eucaliptus obliqua
 Los eucaliptos y el fuego
Los uombats
Powers Lookout
Harry Powers, otro bushranger legendario
Mount Buffalo
Parque Nacional Alpino
Mount Beauty
Mount Bogong
Mariposas bogong
Museo de la lombriz gigante (hay fotos con lombrices larguísimas que no son muy agradables). Al final del artículo hay una foto del Museo.
Capítulo 12
Separados por mil kilómetros Brisbane y Sidney, Bryson ha de hacer una parada técnica en Macksville, Nueva Gales del Sur. Y no muy contento. Tras dar un paseo, instalarse en el Nambucca Hotel, ver las noticias (la tele estaba puesta sin sonido), reflexionar sobre lo lejos que está Australia de todo, lo asombrosamente fácil olvidar, o al menos no ser muy consciente, de que existe un mundo más allá, y terminar de leer el manual de Manning Clark (un historiador que no es de su devoción, pero al que lee porque en Australia esta obra es referente), y constatar que termina en 1935 ¡en 1935, como si los sucesos históricos posteriores no tuviesen la más mínima importancia!, decide cenar. Otra odisea. Y sumado a ella, el tiempo. Bryson se está quedando sin tiempo para realizar el viaje actual, así que se retira a un apartado del bar con sus mapas y decide ir a un lugar llamado Myall Creek. Cambio de planes. Ya era hora de tener en cuenta a la gente olvidada de Australia.
Algunos enlaces:
Macksville, Nueva Gales del Sur
Brisbane
Surfers Paradise Queensland
Gran Plátano de Coff´s Harbour
Myall Creek
Capítulo 13
Bryson se ocupa en este capítulo del pueblo invisible del planeta. Un pueblo magnífico, capaz de percibir el mundo de manera diferente a los demás, capaz de llegar por mar a Australia y poblarla (de una manera inaudita, misteriosa y brillante) en una época primitiva en la que los estudiosos no reconocen que ningún pueblo dominase la navegación hasta ese punto. Los aborígenes, poseedores de la cultura más antigua que se conoce (la familia de lenguas aborígenes es la más antigua del mundo). Oh, sorpresa para el occidental: los primeros pueblos aborígenes se relacionaban, colaboraban entre sí y empleaban tecnología avanzada y habilidades organizativas en una época muy anterior a lo que nadie había supuesto. (Por cierto, que leyendo la cita de James Cook sobre los aborígenes me he acordado de lo que nos comentaba nuestra compañera Olga: “Su aspecto es el más miserable de la Tierra, pero son mucho más felices que nosotros los europeos. Viven con una tranquilidad que no concibe la desigualdad: la tierra y el mar, a su ritmo, les facilitan todo lo necesario para la vida (…) no parecen dar valor a los que les damos y no quieren desprenderse de lo suyo”. “Lo único que parecen desear es que nos marchemos”. Señor Cook, qué perspicaz.
Y luego, el genocidio, las matanzas, primero legales y luego instaladas en el limbo de la alegalidad. Consideradas fieras de la jungla, infrahumanos o inexistentes. Llama la atención que un bandido asesino como Kelly acaparase tanta atención y un pueblo extraordinario casi ninguna, excepto aquella que se precisaba para exterminarlos. Y esto, lo vemos en toda la Tierra. Parece que el ser humano se empeña en aniquilar lo que no entiende, lo distinto, lo que estorba a su mirada o a sus planes colonizadores y de conquista.
Bryson descubre cómo se ha silenciado la masacre de Myall Creek, y aunque logra hablar con una periodista que realizó su tesis sobre ello, no parece que descubra nada nuevo, está todo bien oculto, bien escondido.
El viaje, por el momento, termina en Queensland, en Surfer’s Paradise, y la decepción de Bryson, es una ciudad más, como puede ser Marbella… ahora, ingenio tuvieron al cambiarle el nombre y diseñar esa Costa Dorada…
Podemos comentar, por ejemplo, si no os parece curioso (cuando menos), cómo les incomoda a los australianos que les recuerden su pasado de reos de la justicia y, sin embargo, asienten mitos sobre asesinos convictos; cómo los extraordinarios aborígenes y su historia han sido silenciados, ninguneados, marginados y masacrados…
Algunos enlaces:
Jim Bowler
Joseph Birdsell
John Mulvaney
Biblioteca Pública de Nueva Gales del Sur
Watkin Tench
Tim Flannery
La masacre de Myall Creek
Aborígenes australianos
Los aborígenes australianos mapearon Australia con cantos y rituales hace miles de años.
Día Nacional del Perdón en Australia (Desde 1910 hasta 1970, más de 50.000 niños aborígenes fueron apartados de sus familias y colocados en instituciones con la idea de criarlos a la manera occidental).
Otros pueblos. Aborígenes, Australia. RTVE, 1993. (Vídeo, 58 minutos).
Australia. Los hombres del quinto mundo. (Vídeo, 55 minutos).
Gold Coast Queensland
La boda de Muriel, tráiler.
Vuestro turno, lectores. Contadme, contadnos. Nos leemos.  
(La fotografía es de rtve.es).