4º Mamaíta y Misterios S.A.
Libro que estamos comentando:
El señor de las muñecas y otros cuentos de terror
MAMAÍTA
!Por fin un relato de terror de verdad! Las serpientes nos dan miedo, o por lo menos yo no conozco a nadie que no se sobresalte cuando se encuentra con alguna. Tal vez a las serpientes reales ya nos ayamos acostumbrado después de verlas en el zoo o en los documentales de animales, sin embargo cuando se utilizan como instrumento para generar terror en el cine o en la literatura su éxito está garantizado.
Algunos antropólogos dicen que este miedo lo desarrollamos antes de nacer, que es algo genético, vamos. Es más, se cree que lo hemos heredado de nuestros ancestros que descubrieron que algunas son muy venenosas y que con una simple mordisco nos pueden matar.
La "mamaíta" de MAMAÍTA no ataca y parece que mantiene una existencia plácida en la habitación del fondo de la casa de los Clovis. Esa misma placidez es la que aparentemente se disfruta en esa familia tan unida, tan feliz y tan hippy. Por eso el contraste entre la vida familiar en casa de Violet, la protagonista, y la que se adivina en la familia de su sorprendente nueva amiga Rita Mae descoloca a la joven, que se siente por fin querida y aceptada con normalidad sin que nadie se meta con ella ni la desprecie por su aspecto.
Violet es otro ejemplo de jovencita confundida y con baja autoestima de las que aparecen en esta colección de relatos de Joyce Carol Oates. Su personaje lo hemos visto con frecuencia en películas y en la vida real: bajita y gordita; no es muy popular entre sus compañeros de instituto y su madre no tiene mucho tiempo de ocupàrse de ella. Es la candidata perfecta para caer en las manos de alguien que la manipule y consiga lo que quiera de ella.
En cierto momento, Violet, al igual que los lectores, se da cuenta de que las zalamerías y las atenciones de los Clovis hacia ella sobrepasan los límites normales de la buena educación. Lo terrorífico es que su destino va a estar vinculado inevitablemente a esa habitación oscura del fondo de la casa.
MISTERIOS S.A.
En este último cuento los protagonistas no son jóvenes sino una pareja de libreros que ocultan sus oscuras intenciones el uno hacia el otro. "Misterios S.A." es el nombre de una pequeña, prestigiosa y coqueta librería que se encuentra en una próspera localidad costera. Su atractivo y su evidente éxito, en un momento en el que los robos de libros, internet y las ventas por Amazon acosan la misma supervivencia de las pequeñas librerias, sorprenden a un librero que ha conseguido con muy malas artes acaparar una importante cantidad de librerías en Nueva Inglaterra. Sus métodos varían: agujas hipodérmicas, velas de olor, puros, Jerez, aguardiente, whisky, macarons o bombones envenenados; pero sus intenciones son siempre las mismas: eliminar la competencia en el negocio del libro acabando con la vida de los propietarios para después adquirirlas a bajo precio a viudas y herederos.
Las intenciones de Charles Brodkden, el supuesto nombre del librero de rapiña, se advierten enseguida, pero la amabilidad, las miradas de soslayo y la aparente inocencia del propietario de "Misterios S.A.", Aaron Neuhaus, nos hacen sospechar de cuales son sus verdaderas intenciones. Al final, se repite el viejo cuento del cazador cazado. Pero todo se envuelve con una fina ironía y amabilidad que ocultan las verdaderas intenciones de ambos.
El relato es además un verdadero catálogo de libros, autores y nombres de revistas de culto en el universo de un buen bibliófilo de la literatura de misterio. Incluso se cita una definición perg¡fecta del género: "Los libros de misterio surgen del profundo misterio de la vida. Y a su vez los libros de misterio nos permiten ver con más claridad el misterio de la vida desde perspectivas distintas de las nuestras". Si algún nombre propio nos es desconocido, deberíamos tomar buena nota, porque no sobra ninguno de los que aparecen en las conversaciones de los dos portagonistas de este relato.
Enternece la confianza y suficiencia de Charles cuando fantasea con los resultados de la que prevé que será una nueva exitosa adquisición. Imagina con avaricia la posesión de las joyas de la librería, pero tambíen sueña con disfrutar del ambiente relajado, influyente y elegante que ha conseguido crear el actual porpietario. Incluso llega a soñar con ocupar su lugar en las relaciones con su empleada o con su futura viuda.
Hay mucha perversidad en el diálogo entre los dos personajes, sobre todo cuando el lector contempla cómo el supuesto malvado se ve envuelto en la tela de araña que ha dispuesto para él dueño de la librería. Al fin y al cabo, como se refleja en el relato de la historia de la librería, todo consiste en un mecanismo de defensa que proviene de nuestros más lejanos ancestros. Cuando advertimos el peligro, tenemos el permiso para defendernos de lo que nos amenaza, aunque sea con unas inocentes tazas de un exquisito capuchino.
P.S. Podéis leer más relato cortos de la autora en su página personal Celestial Timepiece. A Joyce Carol Oates Patchwork