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1ª parte. Los años de la locura
Libro que estamos comentando:
El problema de los tres cuerpos
China se está convirtiendo, se ha convertido ya de hecho, en una gran potencia mundial en el ámbito de la política, la economía y también de la tecnología. Su último gran enfrentamiento con los Estados Unidos se ha producido, más allá de la controversia con la compañía fabricante de teléfonos móviles Huawei, por el dominio de una tecnología clave para la siguiente gran generación de productos y servicios digitales. En este porceso de guerra fría digital quien llegue antes y mejor tiene mucho que ganar económicamente y en términos de poder mundial.
En EL PROBLEMA DE LOS TRES CUERPOS, aunque se cita desde el principio la buena colaboración entre militares y servicios de inteligencia de la OTAN y Estados Unidos, China muestra su capacidad para afrontar los riesgos y las eventualidades de unos desafíos que tracienden la zona de influencia terrestre.
Cixin Liu sitúa el comienzo de la acción en la Revolución Cultural china, la Gran Revolución Cultural Proletaria en el ampuloso lenguaje comunista, donde las distintas facciones en las que se fragmentan los Guardias Rojos luchan entre sí para alcanzar el poder y servir a las directrices de Mao, el Gran Timonel. "Un mar de locura que se propagaba por la ciudad, inundando hasta el último rincón".
En el Pekín de 1967, un proceso judicial (por llamarlo de alguna manera), en el que se juzga la fidelidad al credo oficial de los intelectuales universitarios chinos, se convierte en un método de depuración, bajo la acusación de actitud contrarevolucionaria, de cualquiera que no secunde la ideología oficial.
Ye Zhetai, profesor de Física, sufre la acusación de introducir en la enseñanza conceptos tales como la Teoría de la Relatividad, el Big Bang o la mecánica cuántica y por ello es sacrificado por la turba desaforada de estudiantes radicales. Muy acertadamente el autor titula este capítulo con el lema "Los años de la locura".
En el capítulo 2, dos años después, su hija Ye Wenjei se encuentra recluida en un campo de trabajo en la frontera sinomongola junto a otros jóvenes hombre y mujeres que un día estuvieron inflamados de fervor revolucionario. Ella, astrofísica que fue testigo del aesinato de su padre, es víctima del ambiente paranoico que se vive en el campo. Cualquiera puede ser acusado y declarado culpable de ser contrarevolucionario por cualquier escusa, por nimia que sea, y el cumplimiento de la pena puede ser pagarlo con la vida.
Ye Wenji personaliza el estupor de los estudiantes que han sido sacados por la fuerza de las aulas para realizar en el campo y en los bosques tareas que van a engrandecer y a defender a la República Popular China. Solo que ese esfuerzo parece inútil ante la inmensidad del territorio.
Allí, en el territorio de la Mongolia interior y bajo la misteriosa antena parabólica de Pico Radar, de lo que sí es plenamente consciente es que las tareas en el campo de trabajo están suponiendo la destrucción del medio ambiente y acabando con los signos más visibles de la naturaleza en la región: los árboles y los animales.
El estigma de ser hija de un científico castigado por reaccionario y otras pruebas circunstanciales le hacen ser víctima de una acusación de propaganda reaccionaria y estar a puno de morir por las malas condiciones de su confinamiento.
De una muerte casi segura es rescatada por Yang Weining, ingeniero jefe de Pico Radar y antiguo alumno de su padre. Conocen su preparación teórica para participar en un proyecto secreto que se realiza en la base y que recibe el misterioso nombre de Costa Roja. Es 1969 y Ye Wenjei acepta la invitación a unirse al proyecto.
En la segunda parte de la novela, titulada "Tres cuerpos", el protagonista es Wang Miao y la acción ocurre en la actualidad, en 2007, cuando la novela fue escrita.
Wang es ingeniero en nanomateriales. Es invitado a participar en una reunión de militares y científicos en la que se debaten principalmente de la muerte de reputados científicos que pertenecian a una organización internacional, Fronteras de la Ciencia. Esta organización pretende promover la concisión y la claridad de las teorías clásicas de la Física, ya que los modelos teóricos modernos se están volviendo mucho más complejos y, de alguna forma, más difíciles de demostrar.
Wang, animado a participar y a servir de enlace (o de espía) entre el gobierno chino y Fronteras de la Ciencia, entra en contacto con científicos que le abrirán nuevas vías de conocimiento que él, hasta ahora desconocía.