3ª parte. Hasta el capítulo 2 del libro 3.
Libro que estamos comentando
La parte anterior acababa con una pregunta incómoda para Oliver Latham: "¿Dorothy Seton le envió una carta poco antes de suicidarse?". De la respuesta, y sobre Dorothy, no vamos a tener ninguna noticia durante esta tercera parte.
Teníamos la esperanza de que el suicidio de Dorothy, la difunta mujer de Maurice, las aclaraciones sobre su vida, su relación con su marido y con los demás habitantes de Monksmere nos aportasen alguna pista para aclarar la muerte y mutilación de Maurice Seton. Sin embargo, Dalgliesh solo consigue sospechas sobre ella, pero ninguna certeza. Se suicidó introduciéndose en el mar, tras recibir una carta de su marido, mientras estaba de vacaciones. No existen evidencias del contenido de la carta ni de que mantuviese una relación secreta con Latham.
Por contra, el capítulo 16 se inicia con un encuentro entre Dalgliesh y Reckless, donde este le informa en primicia de una auténtica novedad: Maurice Seton murió de muerte natural, de un ataque al corazón que tuvo lugar sobre la media noche del martes anterior al que sucede la entrevista. Las pesquisas de Reckless lo sitúan unos días antes cenando con normalidad en un club de mala reputación del Soho londinense, el Cortez Club.
El inspector Dalgliesh decide por su cuenta realizar algunas averiguaciones, porque su tía Jane aparece cada vez más directamente implicada en el caso Seton. El hacha con sangre de la víctima apareció en su casa, de repente, sin que se sepa quién la dejó clavada en un mueble. O es una broma macabra o una provocación para implicar a los Dalgliesh.
Adam Dalgliesh acude al Cortez Club, donde charla con dos viejos conocidos: el dueño Luker y Lily Coombs, la chica con la que Maurice habló poco después de cenar y que confiesa que dio un paseo en taxi mientras contestaba a las preguntas de Maurice sobre el mundo de la droga. Al parecer, este necesitaba información para su próxima novela. Todo muy raro, como piensa Dalgliesh; al menos todo lleno de medias verdades e informaciones incompletas.
Ese mismo día, Dalgliesh visita también el Cadaver Club, el local donde se alojaba Maurice cuando visitaba Londres. Los responsables le enseñan la habitación donde el difunto escribía sus novelas y le informan de sus costumbres cuando se alojaba allí.
¿Qué hizo Maurice después de hablar con Lily? ¿Pensaba encontrarse, por lo que parece, con alguien en el barrio de Pagdington? ¿Maurice Seton murió de forma natural o alguien le provocó el ataque, sabiendo que su corazón era débil? ¿Cómo llegó y quién lo trasladó a Suffolk? ¿Por qué le cortaron las manos? ¿Cómo implicar a los habitantes de Monksmere en este caso, teniendo en cuenta que la mayoría tienen coartadas firmes? Son todas preguntas que todavía quedan sin resolver.
En el Cadaver Club, Dalgliesh se cita con Max Gurney, el editor de Maurice, que le anuncia que el escritor le había manifestado su voluntad de modificar su testamento y dedica una parte considerable de sus bienes a crear un premio literario que perpetuase su nombre. Además, el inspector consigue de primera mano información sobre la valía literaria y de la personalidad del difunto. De ninguna de las dos se deshace en elogios.
Lo que todavía no sabe el inspector ni la policía es que en el Cadaver Club se ha recibido una caja por correo que contiene las manos en formol de Maurice Seton. Un misterio más que añadir a la resolución del caso, ¿Por qué Luker no informa de esto a la policía? ¿Únicamente porque tiene fama de torcer la voluntad de los jueces en su beneficio? Puede ser que Digby, el hermanastro de Maurice y principal heredero tras su muerte, es también cliente frecuente del Club y tanto él como Lily Coombs tienen capacidad para influir en su ánimo y manejarlo.
Digby, como heredero principal, es el principal sospechoso, aunque quienes lo conocen bien dudan de que tenga el valor suficiente como para cometer el asesinato de su hermano, además, desconocía el contenido de su testamento, ¿o no? Sin embargo, su papel de sospechoso se esfuma, al menos como responsable único de la muerte y mutilación de su hermano, cuando su cadáver solitario aparece en un refugio para avistar aves en la costa de Suffolk.