2ª parte. Hasta el capítulo 16.

Libro que estamos comentando
Como una madeja con una multitud de cabos de los que tirar para desenredarla, lo que sucede en Monksmere Head tras el anuncio del hallazgo del cadáver de Maurice Seton es un galimatías de testigos con coartadas más o menos convincentes. Hasta que el inspector Reckless no tenga en su poder los datos de la autopsia es difícil establecer algún dato cierto, como la causa de su muerte, la hora a la que seccionaron las manos del cadáver o la forma en la que el cuerpo fue depositado en la barca a la deriva en la costa de Suffolk.
 
En palabras de Reckless: "Solo hemos tenido tiempo de hacer una comprobación preliminar. esta tarde les tomaré declaración. Parece que todos pueden ofrecer una coartada para la hora de la muerte, todos menos la señorita Dalgliesh. No resulta sorprendente, dado que vive sola." Este último detalle va a complicar aún más las relaciones entre Dalgliesh y el inspector Reckless, además, puede que el hacha de su tía haya sido la herramienta utilizada para "tajar" (aunque es sinónimo de cortar, parece aquí que el efecto de tajar es más burdo y menos profesional que el de cortar o diseccionar) las manos de Maurice.
 
En la comunidad literaria de Monksmere todos conocen al inspector de Scotland Yard y buscan su protección ante las preguntas y las conjeturas de la policía local, aunque todos sepan que está de vacaciones y que no tiene competencias en este caso. Dalgliesh tiene que andar con pies de plomo en su relación con el inspector Reckless. Ni tiene intención de meterse en el caso ni Reckless de pedirle ayuda, sin embargo, este a menudo le informa de las novedades que se producen y no olvida nunca que se encuentra ante un reputado inspector del Departamento de Investigaciones Criminales de Scotland Yard.
 
La autora, al menos en esta parte, no mantiene una única línea narrativa, sino que alterna y añade información relevante de los testigos y del propio muerto. Con todo ello crea un caleidoscopio que completa nuestro conocimiento de la comunidad que vive en Monksmere, sus aspectos ocultos y todo lo que tiene que ver con Maurice Seton
 
Más que seguir la trama de la novela, me parece más útil señalar los detalles que me parecen más significativos antes de que, seguro, aparezcan los sospechosos o flaqueen las coartadas de los testigos.
 
- Resulta muy curioso que Celia Calthrop confiese que le sugirió a Maurice, escritor de éxito de novelas policíacas, un argumento en el que todo se inicie con la aparición de un cadáver con las manos cortadas en una barca a la deriva, justo lo que después le ocurre al propio Maurice.
 
- Sylvia Kledge, la secretaria personal y mecanógrafa del difunto, recibe un par de cartas con parte de los supuestos textos para la próxima novela de Maurice Seton. La segunda de ellas, una página mecanografiada, es, palabra por palabra, idéntica al inicio del texto con el que PD James inicia la propia novela. 
 
Su discapacidad produce en los demás un instantáneo sentimiento de culpa de la que ella misma se aprovecha para hacerse imprescindible. 
 
- Una inesperada dificultad para la comprensión continuada de la novela me surge de la identificación de los nombres de las casas, los caminos y las playas. Priory House, Tanner's Lane, Tanner's Cottage, Pentlands, etc. Dalgliesh se mueve por las casas de los vecinos, y ellos también entre sí, con toda familiaridad. De hecho a menudo se comenta que nadie cierra sus casas con llave y que identifican que los propietarios están en casa por las luces que las iluminan por la noche. "Tengo la impresión de que entran y salen de sus casas como les da la gana".
 
- Elizabeth Marley, la sobrina de Celia Calthrop, mantiene una extraña relación con su tía. Parece que Elizabeth no siente ningún aprecio por ella y la soborna para conseguir el pago de su mantenimiento en Cambridge. Su relación con Digby Seton, el hermanastro de Maurice, oculta algún secreto que por ahora desconocemos.
 
- Celia Lanthrop, escritora de exitosas novelas rosas y articulista en revistas femeninas,  es el perejil en todas las salsas que se cocinan en la comunidad de escritores. Todos la minusvaloran y todos la temen.
 
- El particular toque británico se manifiesta con distintos detalles. Por ejemplo, en varias ocasiones se habla del jerez que se consume como buena sociedad británica, jerez barato en casa de Celia y jerez de gran calidad en la de Justin Bryce.
 
- El testamento de Maurice complica aún más la relaciones entre los personajes de Monksmere. La mayor parte de su cuantiosa e inesperada fortuna la hereda su hermanastro si cumple una serie de condiciones, el resto, un reparto de chatarra para pocos beneficiados.
 
- Las cartas que se reciben en Seton House y las llamadas de teléfono que Digby dice haber recibido deben ser obra de alguien con mucho humor negro. La llamada reclamaba la presencia de Digby en una comisaría porque, decían, su hermano había aparecido asesinado en una barca  en el mar, y todo esto sin que todavía se hubiese descubierto el cadáver en realidad.
 
- La mujer de Maurice, Dorothy Seton, se suicidó recientemente, y, al parecer, le escribió una carta cuando estaba a punto de divorciarse de Maurice. A pesar de su belleza y su fortuna, no pudieron encontrar ninguna prueba de que alguien tuviera alguna razón para obligarla a introducirse en el mar hasta perecer ahogada. ¿Tenía alguna relación o era amante de Oliver? Nada que pudiese justificar su suicidio. 
 
- Oliver Latham, crítico literario, hizo lo posible para cargarse la primera obra de teatro de Maurice. ¿Sedujo también a su esposa?
 
- La cena en Priory House, la casa de R.B. Sinclair, con la tía y el sobrino Dalgliesh, por un lado, y Sinclair y su ama de llaves Alice Kerrison no es de lo más inusual, Jane acude de vez en cuando a las invitaciones de Sinclair. Lo primero que el inspector aprecia es que la relación entre los anfitriones es bastante particular. Ni ella lo trata como si fuera el genio literario que sus primeras novelas así hacían pensar, ni él la trataba como una criada. Ella había sido anteriormente criada en Seton House y seguro que conocía muchas intimidades que se sucedieron en esa casa.
 
Esta parte, finalmente, concluye con la noticia que todos los policías estaban esperando: Reckless ya conoce el informe de la autopsia y quiere compartirlo con Dalgliesh.