3ª parte. Los manuscritos de Barri Aznárez. Hasta el capítulo 21.

Libro que estamos comentando
Rosa Montero no describe con detalle el tipo de sistema político que gobierna la Tierra. En las novelas anteriores apunta que, después de la guerras robóticas, los países de la tierras se unen en una gran federación, Gobierno Global, en la que los grandes continentes y los Gobiernos Regionales gozan de autonomía.
 
Cuando surgen los conflictos, los lectores podemos imaginar las reglas que rigen los EUT cuando los comparamos con los intentos que los otros mundos o los grupos terroristas hacen para desestabilizarlos. 
Aunque no se manifieste directamente, se intuye que los EUT gozan de un sistema democrático condicionado por multitud de vicios y una degradación social que ponen en peligro su propia existencia. El poder económico genera una clase social dominante que se apoya en las fuerzas de seguridad para mantener su poder. La igualdad de los ciudadanos no parece ser un objetivo primordial del estado. Muchas personas viven en condiciones penosas, poniendo en peligro su vida, porque no tienen los recursos suficientes para abandonar las zonas de la Tierra con mayor contaminación ambiental.
 
Aun así los EUT sufre de incertidumbres por la presión de los grupos totalitarios internos que quieren implantar un sistema dictatorial en la Tierra y por las tensiones con los otros dos mundos artificiales que giran alrededor de ella, Cosmos y el Reino de Labari. Estos sí que son claramente totalitarios, y ante ellos el poder de la oligarquía y de los grandes grupos económicos pueden parecer pecados menores. La constatación de que la opinión pública importa a los gobernantes de los EUT es que ellos utilizan todas sus argucias para resultar opacos a la opinión pública.
 
En esta tercera parte de la novela se consolida el grupo de seres que, como una gran familia, giran alrededor de Bruna y necesitan de su protección: Gabi, la niña rusa, y su amiga Emma se quedan a vivir permanentemente con Yannis, y Ágela y Bartolo tienen ya presencia habitual en el grupo. La última incorporación surge de la visita inesperada de Barri Aznárez, la supuesta hermana de Lizard. Desde el primer momento levantará sospechas sobre su verdadera identidad. Parece que de esta forma Bruna reúne la familia que por su propia condición de androide parece imposible. 
 
Es Barri quien muestra a Bruna las primeras pistas convincentes sobre el destino de Paul Lizard en forma de dos misteriosos manuscritos que él mismo ha pedido a su hermana que haga llegar a Bruna.
 
El primero es un facsimil de una lámina en la que se describe el funcionamiento de un pájaro mecánico, posiblemente un cuervo. Yannis enseguida identifica al autor con el inventor del siglo XVI Juanelo Turriano. El segundo es un documento que muestra una serie de lineas compuestas por una combinación de texto y números.
 
De inicio son escasas pistas para encontrar el paradero del grupo terrorista que mantiene prisioneros a Lizard y al resto del grupo de rehenes. Los terroristas han iniciado su presión sobre el sistema amenazando con ejecutar cada día a uno de sus rehenes si no se acceden a sus pretensiones.