El sendero de la sal
Solo unos días después de que Raynor descubriera que Moth, su esposo de treinta y dos años, sufría una enfermedad terminal, les arrebataron su hogar y perdieron su modo de subsistencia. Sin nada que perder y en poco tiempo, tomaron la valiente e impulsiva decisión de caminar las 630 millas del Sendero de la Costa Sudoeste de Inglaterra: de Somerset a Dorset, pasando por Devon y Cornualles. Sin apenas dinero para comida o refugio, debían cargar solo con lo esencial para su supervivencia, acampando en el remoto y degradado paisaje de acantilados, mar y cielo. Sin embargo, a través de cada paso, cada encuentro y cada prueba, la caminata se convirtió en un viaje extraordinario. El sendero de la sal es una historia real y sincera sobre la aceptación del dolor y el poder terapéutico del mundo natural. Al mismo tiempo, es una representación del hogar y de cómo se puede perder, reconstruir y redescubrir de las formas más inesperadas. Una memoria inspiradora y una historia fascinante sobre perderlo todo y encontrarse entre el mar y el cielo. Para Raynor y Moth, el diagnóstico más cruel y el colapso simultáneo de su negocio abren una puerta inesperada a la salvación, a través de un viaje descrito con una narrativa arrolladora, sobre el coraje interno y la capacidad sanadora de la naturaleza.
Temas propuestos
Finalizamos El sendero de la sal
Queridas viajeras, queridos viajeros,
¿Cómo estáis? Llegamos al final de nuestra lectura viajera compartida con el comentario de la Parte VI de “El sendero de la sal” de Raynor Winn.
Moth y Ray...
Parte IV y Parte V
Queridas viajeras, queridos viajeros…
“Y si la niebla entra bien y deposita dulcemente el aire salado sobre el fruto, entonces tienes algo que no se puede comprar con dinero y que los cocineros no...
Parte II y Parte III
Queridas viajeras, queridos viajeros… ¿cómo estáis? Espero que bien, aún surfeando la ola de calor que nos azota estos días… En El sendero de la sal hace calor, pero también llueve y hace frío. No en...
Prólogo y Parte I
Queridas viajeras, queridos viajeros…
Iniciar un viaje, empezar un libro, comenzar la conversación. Cada día, cada mes, tenemos la posibilidad de estrenar una primera vez. A mí, esto, me parece...