Otra vuelta de tuerca: capítulos 1 al 6
¡Hola! Bienvenidos/as a la lectura compartida de Otra vuelta de tuerca. Durante cuatro semanas leeremos, y comentaremos la novela. El ritmo de lectura del libro va a depender de vosotros/as, pero os pido por favor, que los comentarios que se hagan se ciñan a la parte que hemos leído, o anteriores. Vuestra participación, por medio de los comentarios y el debate, será lo que hagan que esta experiencia resulte atractiva. En esta primera semana intentaremos comentar todo lo que sucede hasta el capítulo seis incluido. Otra vuelta de tuerca se compone de 24 capítulos y leeremos a un ritmo de seis capítulos por semana, quedándonos la última semana para comentar aspectos generales del libro.
Pero antes de entrar en materia, hagámos un análisis de ls que vamos a leer, pues en este relato de terror lo que se dice es tan importante como lo que no se dice, sus fantasmas apenas si hacen algo más que «aparecerse» y su malignidad es sólo supuesta por la narradora de la historia, pero no por ello la novela es menos inquietante, más bien al contrario. Ya se sabe que lo que se sospecha, lo que no se sabe y apenas si se intuye, es aquello que más escalofríos provoca.
Todo ello hace además que este libro pueda tener múltiples interpretaciones, como acertadamente se manifiesta en el apéndice. Sin duda la que más interés suscita es aquella que considera que los sucesos contados son en realidad un intento de abordar el análisis de la psicología de las personas y de la presencia en cada uno del bien y del mal.
La historia atrapa al lector desde el primer momento. Cada capítulo se cierra con una Interrogación o un nuevo aspecto del misterio que incitan a pasar rápidamente al siguiente.
El lector desea descubrir una verdad o una explicación que finalmente no le son reveladas en un final que, tras el estupor que provoca, invita a la reflexión personal y a la búsqueda de una solución personal que permita acercarse a la comprensión de los «hechos» narrados.
La presencia de los niños como principales protagonistas de las situaciones que suscitan el terror de la narradora, aporta un matiz más a las sensaciones de agobio y angustia crecientes que provoca la novela.
En la época en la que fue escrita, la inclusión de niños en este tipo de libros no era frecuente; sin embargo en las últimas décadas este recurso ha sido ampliamente utilizado tanto en el cine como en la literatura de este género.
Otro aspecto interesante es la recreación del ambiente que hace Henry James, que aprovecha toda la imaginería procedente de las novelas de terror románticas para construir un escenario que predispone al lector a pensar que algo terrible va a ocurrir o que un penoso secreto se Esconde detrás de cada piedra o cada árbol.
Por esos lugares se mueven unos personajes que parecen esconder algo turbio y en cuyas relaciones podemos descubrir algo más de lo que realmente se dice. No hay más que pensar en los reveladores coloquios entre el niño y la institutriz, que, sacados de contexto, se podrían tomar por los diálogos mantenidos por dos amantes que se sienten culpables.
Además, la presencia de los muertos o de los ausentes es tan decisiva como la de los habitantes «verdaderos» de la mansión.
La estructura narrativa recurre a un recurso clásico: el manuscrito cedido por la persona que vivió los hechos y que ahora es leído ante un atento auditorio.
Ese grupo que se nos presenta inicialmente y que no vuelve a aparecer, somos todos nosotros, los lectores, a los que hábilmente se prepara para que se interesen vivamente por la historia que van a oír-leer. El relato dentro del relato y el narrador que narra dentro de la narración, y que es el «alter ego» del autor, aparece en los cuentos de tradición oral, en obras tan conocidas como El Quijote, El nombre de la rosa, El clavo, Cumbres Borrascosas, La piedra lunar o muchos relatos de terror de Maupassant, y tiene un representante ejemplar en la figura de Marlowe creada por Conrad. El resto del relato está escrito en primera persona, lo cual hace aún más compleja la interpretación de la novela, ya que se puede cuestionar cada una de las afirmaciones que hace su autora, no tanto porque no sea sincera, sino porque en realidad no sea consciente de lo que implican sus «visiones» y sus sentimientos por todo lo que le está ocurriendo.
¿Qué nos cuenta Otra vuelta de tuerca?
Una institutriz acude al cuidado de dos niños en una vieja mansión victoriana. Lo que en principio parece un cometido agradable derivará en una situación de pesadilla. Los niños viven impactados por un pasado inmediato en el que la anterior institutriz, la señorita Jessel, y Peter Quint, el criado y ayudante de cámara del patrón (el tío de los niños), mantenían una turbia relación. La vida junto a la anterior institutriz y su muerte posterior han dejado en ellos una huella indeleble. Al tratar de ayudarlos, la protagonista de la historia comienza a escuchar voces, canciones, y a ver perturbadoras imágenes.
Hasta ahí os voy a contar, el resto averiguadlo vosotros.
En 1997, el programa de radioteatro Historias de Radio Nacional de España, debutó con una adaptación en seis episodios de Otra vuelta de tuerca protagonizada por Lourdes Guerras como la institutriz, Natalia García como la Sra. Grose, Blanca Gala como Flora, y Maribel Sánchez de Aro como Miles. Tal adaptación sería repuesta en 2002, en el quinto aniversario del programa. Hoy os dejo el enlace del primer capítulo. https://www.ivoox.com/historias-rne-01-henry-james-otra-vuelta-audios-mp3_rf_916242_1.html
Feliz y placentera lectura. Nos leemos la semana que viene
Saludos
Alejandro