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Final de La vuelta al mundo en 80 días

Libro que estamos comentando: 
La vuelta la mundo en 80 días

Queridas viajeras, queridos viajeros,

¿cómo estáis? Terminamos nuestra vuelta al mundo de una manera trepidante y aventurera, como nos ha acostumbrado Julio Verne a lo largo de todo el libro. Pero, también, de una manera muy romántica:

¿Qué beneficios le había reportado el viaje?

Nada, se dirá. Nada, quizás, a no ser una encantadora mujer que, aunque parezca mentira, le hizo el más feliz de los mortales.

Verdaderamente, ¿no daría cualquiera por menor una vuelta al mundo?

Ahí es nada.

En estos últimos capítulos Fogg se revela como un hombre fascinante que guarda muchísimo secretos. No sé a vosotros qué os parece, pero el detalle de que prácticamente amotinase el barco, el Henriette, y que luego fuese capaz de capitanearlo como un perfecto marino… ¿Es que Phileas Fogg había sido marino? Este hombre es una caja de sorpresas hasta el final.

Sin embargo, pese a todos los inconvenientes y desgracias acaecidas, nuestro héroe continúa frío e imperturbable, con una serenidad que ya la quisiéramos para nosotros en nuestra vida diaria… ¿verdad? Luego, se descuelga como un hombre enamorado cuando la propia Mistress Aouda le pide que se case con ella. ¡Cómo oculta sus sentimientos Fogg!

¿Y Picaporte? ¿No creéis que se ha equivocado desde que supo quién era Fix? Él se arrepiente, pero no alcanzo a comprender por qué no se lo dijo a Fogg (más allá de que así Verne ha mantenido el suspense sobre la identidad del ladrón del banco, claro). Y, de nuevo, Fogg que apenas se inmuta (bueno, un poco, sí. Menudo puñetazo le arrea a Fix. Y a Picaporte se lo recrimina, sin palabras o con las justas, según se mire).

El capítulo de Fogg comprándole el barco al americano y quemando toda la madera es épico. ¡Y qué avispado el capitán Swetty! Avispado, gruñón y misántropo. Claro que lo antisocial se le va con un buen fajo de billetes (he aquí otro estereotipo, otro prejuicio de Verne. Hay unos cuantos en la novela).

Todo está lleno de giros en la trama parece que no y, finalmente, sí. Parece que sí, y finalmente no. Esos giros, le dan mucha emoción, a qué negarlo.

Bien, algo intuíamos que podía pasar con los husos horarios, claro. Y creo que el detalle del día ganado es algo que, aunque hasta ahora no hayamos leído la novela, hemos escuchado o visto en alguna película o serie de televisión. Es sumamente emocionante llegar casi en el último minuto al Reform Club.

Y sí… si no hubiera pasado por la India, Fogg hubiese dado la vuelta en menos días, pero hubiese perdido la oportunidad de amara Mistress Aouda (qué romántico, Julio Verne).

Llegamos al final y me gustaría mucho que comentaseis qué os ha parecido la novela, si ha aguantado bien (o no ) el tirón del tiempo, si os gusta más alguna versión cinematográfica o alguna adaptación para serie que el libro original o es al revés. Y… ¿cuál es vuestro personaje favorito? ¿Y al que más odiáis? Yo lo tengo claro, pero quiero esperar a ver si os animáis a compartir vuestras impresiones. J

Os voy a compartir este episodio de pódcast de 2016 A la aventura, Libros y lectura, que sirve, también, como resumen de toda la novela.

Por cierto… ¿no creéis que Mario Moreno, Cantinflas, es un increíble Picaporte? (Sí, en globo no viajó el Fogg de Verne, no…)

Vuestro turno. ¿Nos leemos?

Película de 1956. Mario Moreno, Cantinflas.